-Angerona o Anginora, La Diosa Romana
Qué callar muestra con el dedo en los labios locos
Una diosa romana llamada Angerona, Anginora
se lamentan, metafísicas quimeras, perdida hora
desgarradora angustia, ese grito de unos pocos.
Estoy cansada de oír en mí esta palabra que resuena
tan fuerte que mi alma aún hoy se estremece y quebranta
para siempre mi corazón que se abandona adelanta
en el abismo de la desesperación que me aprisiona.
Parece resistir sin falta el paso del tiempo, cual galopo,
Y sacar su fuerza de los más pequeños recuerdos
martillar cada día mi mente e invadir ecos perdidos
abatirme con sus golpes para aniquilarme y yo arropo
Suavidad romana, ese silencio que borren mis ojos llenos,
de lágrimas, Pero ya no bajaré los brazos tan tremendo
es necesario mataré el silencio con un gran estruendo
Gritando al cielo su nombre con silencios buenos,
Debilitado por el pesado peso de las ruinas del este
amor Me inclino ante estas brasas que ahora me rodean
quemado sin vergüenza con temor ya ahora parpadean
siempre cubren las huellas de nuestro camino aseste.
Cómo no ver estos signos como cual evidencia
Ensordecido y ciego por mi exceso de confianza de Creer
constantemente con la ignorancia mujer del tener,
sus acciones se alimentan de tal indiferencia.
Como si saliera de un coma, despertarse a veces parece,
imposible Reflexionar sin descanso sobre este sueño de dos
que ahora es inaccesible Sin querer aceptar sus actos
inadmisibles Nuestra culpa nos invade sin razón aparente.
Pero de esta experiencia descubro que un nuevo horizonte
emerge ante mí como para iluminar con la razón un trueno
nuevo camino en el que vaciaré mi sangre de este veneno
tiempo ha fluido en mí, como una dolorosa traición que afronte
©Natuka Navarro