
Mi querido amigo, cuando abro este corazón besare tu cielo en tus ojos de carmesí caminare de ese futuro de frenesí, única guía el mundo es la mano desazón. Sin embargo, me aburro me dejas sin razón. ¿Pero qué importa? La esperanza de tu ormesí a pesar del disgusto una vida potosí, valor que consiste en envejecer virazón. Solo a veces, cerca de su señora solamente, Recuerda un corazón que demostró su nobleza Mejor que el halcón dorado armado de frente; Que te amó de inmediato y apuesto libremente, En la fuerza y el florecimiento de la belleza duerme para siempre este cerrado presente. |
Clamar e ir de la mano
La amistad es muy corta, es muy bonita. Nos permite establecer una unión afectiva al lado de una o varias personas con características de afinidad, porque toda amistad encierra una relación misteriosa, un poco loca, confiada y prudente. La reciprocidad es una forma de dar, no de pedir, de escuchar sin criticar, de dar una retroalimentación constructiva a medida que crecimiento, de extender una mano amiga en los momentos difíciles, de compartir mi alegría y mi dolor, y de compartir una forma de mi alegría y mi dolor. Clamar e ir de la mano de los más en la carrera de la vida. La forma de existencia que pueden existir con nosotros es absolutamente opuesta a la existencia.
