| El pasto alto necesita ser cortado. Hay que quitar las malas hierbas del jardín. Las aguas residuales se han desbordado. Se necesita un garaje desordenado. Cada persona necesita su atención, pero a él no le molesta. La azotea está goteando y las tejas deben ser reemplazadas. Se le acumula la larga lista de » tareas para hacer. ¿Cuál es la cuestión tan importante que motiva el retardo? ¿Acaso cree que si se pasa por alto, las cosas se irán? ¿Quién puede, con tanto trabajo, hallar una solución? ¿hallar una causa y una excelente manera de posponer las tareas? Ya que es, sin dudas, un sabio. Un gigantón a los vista de su querida familia. Que conoce bien sus emociones y sus prioridades, Y que escoge los temas difíciles para tomarlos. ¿Y en qué lugar se queda este hombre con tanto que hacer? En el patio de atrás, con su hija, jugando. ©Natuka Navarro |
Estas aquí:–> Inicio | Poesía y Prosa | Mi padre tiene las manos
