«El Eco de las Palabras»

Entre los versos de la vida,
mi voz se alza en el aire,
anhelando ser escuchada,
deseando encontrar su destino.

Mi marido me pregunta,
¿por qué escribes, mi amor?
Y yo respondo con sinceridad,
porque necesito compartir mis emociones,
porque mis palabras son mi refugio,
mi manera de sanar el alma.

Pero él me advierte,
¿por qué registras tus escritos?
¿No temes que sean robados,
que alguien más reclame su autoría?

Y en su pregunta, resuena el eco
de las preocupaciones del mundo digital,
donde la propiedad intelectual se desvanece,
y la originalidad se pierde entre el eco de las redes.

Sin embargo, en mi corazón persiste la certeza,
de que cada palabra tiene su hogar en mi ser,
y aunque el tiempo pueda borrar mi memoria,
mis escritos serán testigos silenciosos de mi verdad.

Así que seguiré escribiendo,
con la esperanza de que mis palabras
alcancen aquellos corazones que necesitan ser tocados,
y que aunque el mundo gire y cambie,
mi voz encontrará su eco en el universo