
Cálculos del Amor, Entre Números y Raíces del Ser
Hice cálculos de lo que un día me quisieron,
tracé líneas en las cuentas del corazón,
sumé gestos, resté despedidas,
pero algo en la ecuación no entendí.
En el frío resultado, la frialdad se hizo sentir,
mi ser desolado, vacío de afecto,
en la balanza de números, el amor fugaz pesó,
una cuenta sin respuesta, un vacío que nadie devolvió.
Cifras frías no miden el sentir,
la esencia del alma, el existir.
En el silencio de lo no dicho,
la ausencia pesó, el corazón herido.
Pero en el eco de este análisis frío,
descubro la fuerza de mis raíces.
No todo se mide en lo recibido,
mi amor propio es un tesoro escondido.
En la lección de este cálculo amargo,
aprendo a valorarme, a ser mi propio resguardo.
Aunque la balanza parezca desigual,
en mi ser florece un amor sin igual.
***
Hice cálculos fríos de lo que un día me quisieron,
pesé en balanza de números tu amor fugaz.
Quise medir lo inmensurable, aquello que se fue,
buscando respuesta al vacío de tu ausencia y soledad.
Pero el amor no se mide, no se cuenta ni se agarra,
es como brisa que acaricia y se escurre entre los dedos.
Como el sol que brilla intensamente y luego se oculta,
pero su luz y calor perduran más allá de su partir.
Entendí que no hay cifras ni ecuaciones del sentir,
que tu amor fue un regalo, una llama que encendió mi ser.
Y aunque se extinguió, me dejó calor para seguir mi viaje,
aprendí que el amor más grande está en mi propio corazón.
Así que ya no busco en otros la medida de mi valía,
ni calculo qué me dieron o me deben dar algún día.
Amo la vida, me amo, y eso es más que suficiente,
para sentirme llena y completa en mi existir.
©Natuka Navarro 11 de noviembre 2023