
Deja que te observe frente a tu ventana,
deja que me vea en el mar de tu mirada,
deja que te quiera fantástica y capitana,
déjame hallar el amor a tu lado enamorada.
Deja que mis dulces palabras te cortejen,
deja que mis sentidos recorran tu energía,
deja que las hadas ilusiones y deseos tejen,
déjame sentir tus caricias yo me sumergía.
Deja la emoción y sensibilidad contenidas
deja el estupendo sueño, vuele lejos vida mía,
deja que nuestra pesadillas no sean retenidas
déjame decirte cuánto te quiero noche y día.

Deja cantar cual armonioso canto del ruiseñor,
deja que de este gran bienestar, tanto clamor,
deja anidar en tus labios este beso dulce señor,
déjame que deje estampado, todo este amor.
Se levantan los arboles de señor
los pájaros cantores de tanto amor
dándote, los buenos días de un ardor
florecita resplandeciente por un rumor….
La mañana con tus colores
me podrías decir quién adoro
Es alguien con su música del cielo
llenan los anocheceres de melodías.
esa dulzura que envuelve mi aros
este susurro de mi amanecer ayuno;
tu dímelo deseo se ahora tu sirva.
Músicas vienen del alma de los pájaros,
Dioses, si entre vosotros hizo alguno
Mi verso crecerá: bajo la yerba
©Natuka Navarro