Himno Al Amor De Un Quizás
Amor que eres irresistible
Amor que la riqueza derrochas
que pasas sin piedad en las noches
tiernas de la muchacha, de sus mejillas
que estás hasta en sus sudorosos mares
o en las casas de los amoríos
Ella puede evitarte y vuelves loco al que posees
Tú y las mentes de los justos se desvían
por ti una verdadera epopeya sobre un corazón
que ama y anhela más que cualquier otra cosa.
A su hombre después de todo, creo, te acercas
mansamente, en el espejo de tus ojos se refleja
la alegría detente, mi luz, y aún no te he dicho
la mitad de los que aprietan mi corazón
y se precipitan a mis labios con una sola mirada.
Quizás pases con otro que te diga al oído
No me hables si quieres, no me digas
palabras encantadoras de amor y adoración.
«Basta estar cerca de ti, decirte que te quiero,
tocarte y respirar el frescor de la mañana que respiras;
y aunque esto te parezca demasiado, ¡verte a solas!»
Pues quizás esta música y tu frente soñadora,
Un himno al amor, de un poeta eminentemente
erótico conocido con el seudónimo a solas
¡es ella! ahora querías hacer tantos deseos
tu compañía, como si fuera de noche,
por un camino alrededor de las luces,
tu ventana desearía desplegar de un silencio
que no está el mundo para hablar deberás.
Quizás te diga un día que dejé de quererte,
Nacer volando y acabar mintiendo, con un quizás
Quizás me reconoces, como una hora antigua,
van y vienen a prisa, para adornar sus sienes
con las musas de tu cercanía fácil ingenio
en gracias afluente, de tus quimeras,
de hacerle amar tu hora, deseo volverte a ver,
si esperada quizás, siempre temido…de un Quizás…
©Natuka Navarro