Mi Alma En Las Edades Viejas
He sido la dama de los guerreros heroicos,
la musa de los poetas de pluma y tintero,
he amado a caballeros de enroscadas guedejas,
aunque mi amor siempre fue un fruto prohibido.
Mi alma ha sido testigo de grandes gestas y batallas,
de luchas por la libertad y el honor,
y en cada romance y aventura,
he dejado mi corazón y mi fervor.
Porque mi alma ha vivido en las Edades viejas,
y aún siento en mis venas la sangre de aquellos tiempos,
donde la pasión era la llama que encendía las almas,
y el amor era el tesoro más valioso y sincero.
Ha vivido mi alma en las Edades viejas,
en reinados de reyes y grandes emperadores,
y también en tierras de espesas arboledas,
donde las hadas y duendes son señores.
He vagado en campos de batallas y hazañas,
he sido un guerrero valiente y sin temor,
he luchado por causas justas y nobles,
y he derramado mi sangre por el honor.
Pero también he sido un galán trovador,
recitando versos de amor en cortes y castillos,
enamorando a damas de alta alcurnia,
y siendo el dueño de sus más dulces suspiros.
Y en gentiles mancebos de enroscadas guedejas,
he encontrado la pasión más prohibida,
he amado con fuerza a quien no debía,
y en esa lucha he perdido mi vida.
Así ha vivido mi alma en las Edades viejas,
en un sinfín de aventuras y emociones,
siempre buscando el amor y la gloria,
en un mundo lleno de sueños y de ilusiones.
©Natuka Navarro