Cuando te dejo, a menudo me siento perdida… » Oigo tus pasos, mi corazón te anhela pero te marchaste, y te esperaba…» Impedí que las lágrimas fluyeran en mi corazón…
«A pesar de que a veces, en mi memoria, escucho tu voz… Me quedo de pie, escuchando tu sonrisa.. Temblando, sufriendo, no me atrevo a abrir los ojos Estás demasiado cerca de mí, Tengo la esperanza y la espera de que te vayas uniendo a mi»
En este caso rezo a «mi Dios»… Los sentidos se llenan de alegría y después se llena de tristeza. me da miedo creer en esa felicidad… No puede librarse de mi dulzura…
¿Sigue poco a poco mi tímida sombra? Temblorosa, cuando extendí mis brazos hacia ti, huiste. No Me atrevo a hablarte, no me atrevo a tocarte… Abro los ojos y tu sombra desaparece…
A pesar de que no estás aquí, el día ha terminado… Al soñar, a menudo siento tu presencia Cuando intenté despertarme, contuve las lágrimas… La vista está empañada y el amanecer es poco convincente…
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