
«Sencilla Palabra»
Sencilla palabra, apenas un gesto,
un eco pequeño que guarda un arresto.
No suena tan fuerte, no brilla al hablar,
pero lleva un mundo difícil de explicar.
Es «mamá» en silencio, “te extraño” al pasar,
es «te quiero» escondido en mirar sin mirar.
Es la brisa en la tarde, el sol en la piel,
la nota que queda después del laurel.
Palabra que a veces se dice sin voz,
que late en el pecho, que entiende de adiós.
Sencilla, pequeña… apenas sonido,
y sin embargo, sostiene el olvido.
Sencilla palabra que el alma pronuncia,
cuando ya no quedan certezas ni anuncias.
La dice el recuerdo, la escribe el dolor,
la borda el silencio con hilo de amor.
Es «vuelve» en la sombra, «perdón» sin razón,
la paz que se esconde detrás de un renglón.
Es «gracias» callado, susurro en la brisa,
la lágrima tibia que baja sin prisa.
No pide aplausos, ni busca esplendor,
vive en los gestos, respira el valor.
Como una semilla sembrada en el pecho,
crece sin ruido, pero llega al techo.
Y así va la vida, palabra tras paso,
dejando en el aire su leve abrazo.
Porque a veces basta tan solo un sonido
para abrir la puerta de lo no perdido.
Natuka Navarro
Luna Poetiza



