
«Si No Los Nombro»
Olvido los nombres si no los nombro,
si no los repito como oración,
se me van de a poco, se desdibujan
como la lluvia borra un renglón.
Hay días que temo cerrar los ojos,
por si al abrirlos ya no están más.
Por eso los digo, los cuido, los llamo,
como quien riega lo que no verá.
Digo su nombre para que no muera,
para que el viento no se los lleve.
Los grabo en el aire, los dejo en la espera,
los guardo en el pecho, aunque duela y pese.
Porque si no los nombro, ¿quién los recuerda?
¿Quién les susurra que aún tienen lugar?
A veces no es olvido… es la tristeza
de no saber si van a regresar.
«Será el Olvido»
No sé si es el alma que se me cansa,
o si es la mente que empieza a callar.
A veces los nombres se me escapan
como si el viento los supiera robar.
Busco palabras entre las sombras,
rostros queridos que ya no sé nombrar.
Y duele más no saber si es costumbre
o si hay algo en mí que empieza a olvidar.
¿Será el tiempo, será la tristeza?
¿Será el cansancio de tanto esperar?
¿O será esa niebla sutil y callada
que algunos temen… y suele llegar?
No quiero decirlo, pero lo pienso:
¿y si un día no los puedo encontrar?
Si los nombres se caen de mis labios
y no los puedo volver a juntar…
Por eso los digo, los dejo escritos,
como oraciones que cuido al pasar.
Porque si un día el olvido me alcanza,
quiero que el amor me sepa nombrar.
Natuka Navarro
Luna Poetiza