Siempre soñé ser feliz el momento de piad.
puerto un alma corazón, minimizado anclaje
tiempo demasiado largo de un largo balaje,
último día de calma y apacibilidad.
Una modesta damisela quizás de mi edad
pequeños jugando a su lado con un lenguaje,
Un pequeño círculo entre tu y yo alegre viaje
Y una alegre charla quiero tanta complejidad
Dejé el amor a la juventud ardiente liaba
Quería un alma confiada de un puente candente
y ocultar mis penas, que ella podía leer;
El cielo me dio más de lo que me atreví anclaba,;
y con el tiempo, se tomó un nombre más clemente,
amor llegó cuando ya no se esperaba volver.
©Natuka navarro
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