«Tan Errado como Buscar la Verdad en la Mentira»
En la dualidad de la vida, me encuentro,
como un día sin su noche, persistente y cierto.
Intentando alcanzar el cielo, aunque en lodo me halle,
soy un ser en búsqueda, en un camino singular.
Juzgado y etiquetado sin conocer mi esencia,
ignorando mi historia, dictando una sentencia.
Pero en mi camino prosigo, sin detenerme,
preocupándome de comprender, en lugar de perderme.
Así, tú caes en el vacío de tu propio ego,
quizás yo sea necio, pero tú también lo eres, creo.
La monotonía se adueña de tus actos predecibles,
como una melodía repetida en lo inaccesible.
Respiro la rutina constante, sin juzgar,
tu descripción probable, no me hace titubear.
Mi vida es mía, desconocida para ti,
cuido mi andar, sin preocuparme de lo que omites.
En vez de buscarme afuera, miro en mi interior,
quizás yo sea necio, pero tú también lo eres, señor.
Ambos en la fugacidad del ahora nos perdemos,
agrios y estridentes, venenos sin antídotos tememos.
Soy simple como una hoja en blanco, en busca de mi voz,
siguiendo mi corazón, sin miedo de la razón y su ardid atroz.
Verdades no dichas cortan, pero prefiero enfrentar,
a ser torpe y oscuro, sin luna ni estrellas en mi mirar.
Soy un cero en busca de unidad y verdad,
no dudes, así me ves, pero no es mi finalidad.
En ambos hay una búsqueda, en mí y en ti,
hallar la luz interior, esa es mi eterna ansiedad.
No nos detengamos en juicios y apariencias vanas,
busquemos en nuestro interior, donde la luz se emana.
En la dualidad, en lo cierto y lo errado, hallaremos paz,
encontrando nuestra esencia, el tesoro que nos satisfaz.
Natuka Navarro©