Un abrazo tuyo calma mis noches,
no importa si son largas o son oscuras;
un oasis de paz y de caricias,
renuevan con tu magia que me ofreces.
Tus ojos, verdes luceros del cielo,
me llenan de esperanza y de ilusión;
inspiradas por ti, mis melodías,
cantan de tus virtudes con pasión.
Tu voz es mi refugio, es mi razón,
disfruto de esa música con gusto
y me entrego, me entrego sin medida.
Un abrazo mío, al terminar el día,
se queda en tu cintura cada noche
tras decirte al oído un «te amo».
Mi fiel compañero de mis canciones,
mi amor, mi cómplice en la vida,
eres todo lo que siempre he querido,
mi corazón late por tus emociones.
©Natuka Navarro